Blog personal de Sergio Madrigal donde encontrar textos sobre ciencia y tecnología, psicología, cine y literatura y quizá alguna cosita más.

Mes: agosto 2010 (página 1 de 1)

¿Por qué me gusta Final Fantasy XIII?

Este verano, como parte de mi regalo de cumpleaños, me compré por internet dos juegazos para la Playstation 3.

Por un lado el Call of Duty: Modern Warfare 2, del que un día de estos os hablaré largo y tendido. Impresionante en todos sus modos: la historia, las operaciones especiales y sobretodo su modo online.

Por otro, y aunque siempre he criticado ese tipo de juegos, el Final Fantasy XIII.

Mi crítica a los RPG ha venido siempre precedida del aburrimiento a un juego de este tipo. Para Playstation PSX fue el Final Fantasy VIII. Para Playstation 2, fue el Dragon Quest: VIII.

El modo de juego BTC

Lo que me aburría soberanamente de estos juegos era lo repetitivo que resultaban los combates: al tratarse de un RPG por turnos, era demasiado poco creíble. Ahora me atacas tú, ahora te ataco yo.

Gracias al empleo de la BTC (Barra de Tiempo Contínuo) y a la lucha por equipos, Final Fantasy XIII presenta un modo de juego dinámico. No hay pausas, mientras tú diseñas tu estrategia de ataque, tu cargador se rellena. De esta forma los combates son mucho más veloces y por tanto la sensación es más real.

Esto, sumado a unos gráficos que dejan con la boca abierta en muchos momentos y lo que parece, hasta ahora, una historia muy bien planteada, hacen de Final Fantasy XIII el primer RPG que realmente me gusta.

¿Será éste el primer Final Fantasy que me pase entero?

Un ritmo que hipnotiza.

Hace unos cuantos días que gracias a mi amigo H.Duck descubrí este especial tema de Stromae.

Y digo especial porque seguramente la primera vez que lo escuchéis os preguntaréis qué me he fumado.

La segunda vez os gustará más.

La tercerá os hipnotizará.

Y ahora, bailemos.

Crítica: Toy Story 3

Hablar de Toy Story es hablar de la historia reciente del cine moderno. Se trata de la primera película que se desarrolló íntegramente en 3D en un estudio. Luego vendrían un sinfín de producciones que darían lugar a una rama muy lucrativa para los estudios de cine.

Toy Story 3 venía precedida de dos sensaciones muy distintas: por un lado se trataba de la tercera parte de una obra maestra, realizada por esos magos de la informática y el modelado como son Píxar. Por otro lado, después del desencanto de Toy Story 2, de Shrek 3D o similares, también la acompañaba una sensación de precaución.

Pues bien, Toy Story 3 no sólo cumple, sino que derrocha. Es buena en todos los aspectos: el guión, insuperable, la calidad técnica, a la altura de lo esperado, la música, perfecta y así podría pasarme el rato baboseando encima de la que se va a convertir, sin lugar a dudas, en otro clásico del cine.

Toy Story 3 lo tiene todo: acción, emocion, aventura, sentimientos, humor. Y está tan sumamente bien realizada que el espectro del público que puede verla es amplísimo: desde los críos de 5 años hasta los mayores de 50.

Una trepidante historia de cómo unos juguetes deben fugarse de una cárcel repleta de guiños, de recuerdos y sobretodo de mucha emoción.

Debería ser obligatorio verla al menos una vez en la vida.

starstarstarstarstar (5/5)